lunes, 5 de septiembre de 2011

Y desde ahí arriba el mundo es más pequeño

No he mirado ni siquiera el reloj para saber las horas exactas que me faltan para coger un avión rumbo a Murcia, un año más. Esta vez no voy a poder coger la mano a mi acompañante en cuanto despegue, voy sola, bueno no, me acompañará el libro de "Cosas que no nos dijimos". Quiero pisar tierra distinta, mirar por la ventanilla, sacar alguna que otra foto y sobre todo y exclusivamente quiero dejar aquí el recuerdo de tu olor, hace tres semanas que no se de ti y en cambio es lo que más recuerdo. Vamos, voy a terminar la maleta, toca una semana de sol, que Santander lo único que me ha dejado ha sido varios besos de noches acabadas y lluvia, mucha lluvia.